La popular “patatada” hizo disfrutar de una gran merendola a los vecinos

El ya tradicional día del entierro de la Sardina dio comienzo en la tarde de ayer entre llantos y lágrimas en la plaza de la Villa, donde unos cuantos grupos de torralbeños vestidos de luto, se concentraron para rendir homenaje a Doña Sardina.

Seguidamente, se inició el recorrido con el cortejo fúnebre por las calles adyacentes, hasta llegar a la Explanada del Cristo donde se procedió a la incineración de la sardina y, los asistentes la pudieron despedir con mucho desconsuelo.

Finalmente, para aliviar el dolor por la terrible pérdida de Doña Sardina, familiares y amigos se dirigieron a la pista Municipal para merendar y disfrutar de la habitual “patatada”, producto muy tradicional de la localidad.

En el acto, el concejal de Festejos, Luis Blanco, resaltó “El broche del entierro de la sardina ha transcurrido en la misma línea que todos los días previos, con mucha participación y diversión. La gente ha demostrado que tenía ganas de celebrar el carnaval y se ha volcado”.

Asimismo, aprovechó para dar las gracias a la Peña Ecuestre “La Espuela”, Frutas y Verduras “Carranza” y comida a domicilio “El Tragón” por colaborar en estas jornadas.

Las actividades continúan sin pausa en el municipio con el Certamen de Chirigotas que se celebrará mañana por la tarde y concluirá el sábado con el Gran concurso de disfraces.